Espacio para informar, discutir y compartir en torno a un balón. Porque noventa minutos no bastan.

sábado, 21 de julio de 2007

La influencia de los comentaristas en el disfrute del fútbol


Es y ha sido siempre regla general desde que uno es un niño ávido de entrar al mundo del fútbol que éste es un deporte que se juega solamente con los pies, es lo primero que se le enseña al menor. Más adelante nos damos cuenta de la importancia de la táctica como componente esencial de la fórmula del buen fútbol pues no todo es tirar patadas como bruto, entonces el cerebro entra a jugar también. A partir de este punto nos volvemos hinchas, observadores casi devotos de fútbol los fines de semana. Sin embargo, dentro de cada uno de nosotros es variable el tiempo que demoramos en identificar un factor importantísimo dentro de la emoción (y devoción) que es observar un partido de fútbol: la voz peculiar de algún comentarista.

Uno, a lo largo de su vida, ha visto y verá miles de encuentros de balompié tanto en televisión local como en internacional y cada uno de ellos tendrá un sello característico impregnado en la voz del encargado de relatar dicha épica deportiva. A decir verdad, es posible que este aspecto tenga más peso en hinchas más ‘antiguos’ pues, debido a la ausencia de televisión por cable, pueden haber vivido varios acontecimientos futboleros oyendo a un solo relator en todos ellos (en este momento, parense, vayan donde sus padres y pregúntenles que les describan el cosquilleo que sintieron al escuchar gritar a Humberto Martínez Morosini el segundo gol de ‘Cachito’ Ramírez en la Bombonera que nos clasificaba al Mundial de México ’70).

Nosotros, amigos contemporáneos que ya conocen mi edad por un artículo pasado de este blog, tenemos, gracias a una necesaria globalización del fútbol, la oportunidad de oír narrar partidos a muchos comentaristas de distintas ligas internacionales y lo más probable es que también hayamos desarrollado, sin quererlo, una relación voz-acontecimiento mediante la cual, al más puro estilo de la teoría del reflejo condicionado de Pavlov, al escuchar la voz de nuestro relator preferido empecemos a babear sin parar rememorando cierta hazaña en el verde. Bueno, al menos eso me pasa a mí.

Sólo por mencionar algunos referentes obligados personales están: Luis Omar Tapia, ex narrador de ESPN dueño de una voz que me trae memorables recuerdos de gloriosas Ligas de Campeones (en especial la de 1999) y logra que, sean cual sean los equipos que jueguen, me quede enganchado de un partido; Juan Manuel Pons, argentino narrador de la Liga Inglesa cuya voz es el mejor despertador en los días sábados cantando (literalmente) los goles del campeonato británico. Por otro lado, como referente obligado para los partidos de la Selección Peruana, tenemos a Toño Vargas y sus ya legendarias frases: ‘Hablan las imágenes’, ‘La hora es la hora’, ‘El tiempo apremia’, ‘Acéptalo Carini, Paolo Guerrero fue más.’

Aparte de ellos hay muchos más, tanto en las pantallas como fuera de ellas y dentro de nuestro recuerdo, que también representan (casi siempre) mentes sabias y exclusivas para el deporte rey y que influirán siempre en nuestra percepción del mismo. Me gustaría terminar este artículo con una cita al libro de Jorge Valdano ‘El miedo escénico y otras hierbas’, cita en la que habla del tema. Disfruten y a golear con la voz.

“Cuando Argentina le ganó a Alemania en la final de México 86, me senté en el suelo del vestuario seguro de que había llegado al mejor sitio posible: aquel que había soñado toda la vida. Me pareció que lo indicado era llorar, pero aunque hice fuerzas, no pude. Siete años después, estando ya alejado del fútbol, salí a correr por un parque cercano a mi casa con un walkman para entretener el esfuerzo con música. No sé por obra de quién aquel casete incluía, entre dos canciones, la grabación de mi gol en aquella final gritado por una voz que sonaba a mi infancia: José María Muñoz. Cuando terminó el relato me puse a llorar sin querer. Como si aquella transmisión completara el sueño, como si el fútbol no existiera sin el auxilio de la palabra.”

2 comentarios:

Anónimo dijo...

q GENIO! claro que la palabra influye... quizas no nos damos cuenta pero necesitamos ese complemento y siempre esta presente. Incluso cuando vas al estadio y llevas tu radio jajaja

Ben Solís dijo...

que? en los estadios nadie narra? jajajaja. Interesante articulo, ya sabes -momo- que en mi el futbol despierta tanto interes como en ti las tasas de interes de depositos over-night, pero aun asi... q bueno q escribas cosas cheveres para VUESTRO blog.